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Mantequilla de cacahuete casera

  • Laura Callao
  • 22 abr 2017
  • 3 Min. de lectura

Lo he hecho. LO. HE. HECHO. He preparado mantequilla de cacahuete casera y ¡oh, dios mío! Enamorada estoy. Y mis papilas gustativas están bailando la macarena. Supongo que algunos de vosotros pensaréis: "pues ya me dirás tú qué tiene de especial hacer mantequilla de cacahuete casera, si no tiene complicación alguna". Y es cierto. Es sencillo, fácil, cero complicación, y los sinónimos que queráis. PERO: basado en mi experiencia, conseguir el sabor y la textura perfectas no siempre sale a la primera. El método ensayo-error es muy común en estos casos. Y yo estoy feliz, porque ésta es LA mantequilla de cacahuete. Sencillamente deliciosa.

Amantes de la mantequilla de cacahuete: os recomiendo que la preparéis. Sé que muchas veces nos falta el tiempo, y es mucho más rápido y cómodo ir a la tienda y comprarla (u online, como muchos hacemos). Además, cuando encuentras una marca que te gusta, cosa que no siempre es fácil, pensamos: para qué voy a molestarme en prepararla.... Pero tengo que admitir que hay cierto placer en hacerla tú mismo, desde cero, que después puedes comer tal cuál (véase tostadas con mantequilla de cacahuete o, simplemente, meter cucharada, cerrar los ojos y teletransportarse al paraíso) o bien como base para preparar infinidad de recetas (muffins, pasteles, gachas e incluso salsas para platos salados).

De momento sólo he hecho la "nutella" casera y esta mantequilla de cacahuete, pero en lo que respecta a los frutos secos, creo que casi todas las mantequillas (de pipas de calabaza, de almendras, etc) podéis prepararlas siguiendo más o menos los mismos parámetros. Venga va, ¡vayamos con la receta!

INGREDIENTES:

  • 2 cups de cacahuetes crudos sin piel ni sal (podéis usar tostados)

  • Una cucharadita de canela

  • Pizca de sal

  • Una cucharada de miel o ágave (o dos cucharadas de azúcar de coco) - opcional

  1. Si usamos cacahuetes crudos, lo que haremos es precalentar el horno a 175º y tostarlos unos 10 minutos. Id vigilando que no se quemen. Si usáis cacahuetes previamente tostados, omitid este paso.

  2. Dejamos enfriar y los ponemos en nuestro procesador de comida. Batimos a máxima potencia hasta que los cacahuetes empiecen a adquirir una textura parecida a la de la mantequilla de cacahuete que compramos en el super.

  3. Añadimos la canela, la sal y el endulzante. Éste último es opcional, pero yo se lo eché y no me arrepiento para nada. Tened en cuenta que si usamos endulzante líquido, la mezcla de los cacahuetes se endurece y tendremos que batir durante más rato.

  4. Procesamos todos los ingredientes juntos hasta que, finalmente, digamos: ESTA es la consistencia que quiero!

  5. Disponemos la mantequilla en un tarro de cristal, tapamos bien y contamos los días que nos dura! jajaja

Fácil, ¿a que sí? Como siempre os digo, es esencial tener un procesador de alimentos bien potente. El mío lo es y aún así tuve que ir haciendo la mantequilla por tandas para que no se me recalentase demasiado la máquina. En total tardé como unos 20 minutos.

Lo bueno de este tipo de preparaciones es que podéis adaptarla a vuestros gustos. Es decir, podéis añadirle miel o no, canela o no, vainilla, etc. Las opciones son amplias y yo os recomiendo jugar un poco en la cocina, si tenéis tiempo y ganas, porque así podéis descubrir recetas maravillosas! También es cierto que a veces esas pruebas terminan en desastre absoluto, pero ahí radica la magia de la vida jajaja! No saber qué va a suceder y, a la vez, ser capaz de decir: "vaya grandiosa mi**da me ha salido", reírte, y probar de nuevo!

Espero que os guste mucho. Ya me contaréis qué tal. ¡Ah! Y antes de que se me olvide: últimamente estoy recibiendo muchos mensajes positivos de personas a las que les gusta mi trabajo y que me lo hacen saber, y sólo quería agradecer desde el fondo de mi corazón las palabras de aliento y el apoyo que me dais. ¡Así da gusto!

Con amor,

Laura

 
 
 

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